Por qué decidí decirle adiós a una enorme amiga y jamás me arrepentí

En mis cortos 22 años de vida he pasado por mucho. He vivido un montón de buenos momentos, pero también una gran cantidad de malos. No obstante, si hay algo que valoro y me importa de mi vida, son las relaciones que sostengo con las personas que son próximas a mí.

No soy perfecta. He cometido muchos errores. He lastimado a personas que jamás deseé dañar, y a veces, he llegado a cuestionar mi forma de ser, mas, con los años, he aprendido que no todas las personas que llegan a mi vida tienen la intención de quedarse. Aun, aquellas que han permanecido a mi lado por largo tiempo, algún día se irán.

Amigas sentadas en unas piedras

Y eso es precisamente lo que tú me has enseñado.

Todos cambiamos. Nunca seremos las mismas personas que éramos hace cinco años; quizás, ni tan siquiera somos igual que hace 5 días. De eso se trata la vida: de movernos, de estar en incesante cambio y proseguir avanzando. Evolucionar. Solamente es de esta forma como aprendemos y crecemos como personas.

Si no cambiamos, jamás podríamos pasar a la siguiente etapa de nuestras vidas. Y debemos saber que hay una enorme diferencia entre cambiar y medrar en una relación –de amistad, de amor o bien familiar– y mudar y crecer como individuo.

Babi y Katina en la película 3 metros sobre el cielo

Todos nos confundimos. Tenemos debilidades que nos pueden llevar a decir o bien hacer cosas que no deseamos en realidad. De ahí que algo importante en la vida es aprender a reconocer nuestros errores. Una cosa es reconocer que nos confundimos y cambiar; y otra reconocer que fallamos pero continuar precisamente igual.

La confianza siempre ha sido fundamental para mí. He aprendido que es algo muy frágil, mas sobre todo, que es algo que no se le debe dar con sencillez a cualquier persona.

A lo largo de muchos, muchos años, confié en ti. Aunque en ocasiones nos alejáramos un tanto y duráramos meses sin charlar porque nuestras vidas estaban muy ocupadas. Al final, sabía que en el instante en que te volviese a ver, todo sería como si jamás nos hubiésemos distanciado.

Escena de la película guerra de novias

Pero entonces sucedió algo: me diste la espalda, y en ese instante entendí que debía distanciarme de ti por siempre.

He sido bendecida con la capacidad de perdonar de forma fácil a las personas pero, esa bendición puede convertirse en maldición cuando algunos hacen cosas a sabiendas de que pueden salirse con la suya. Entiendo que es casi una parte de la naturaleza humana, y tú sabías que yo jamás te iba a fallar, sin importar lo más mínimo a cuántas personas les dieras la espalda. Yo confiaba en ti, y suponía que conmigo sería distinto. Hasta que me heriste.

Escena de la serie gossip girl

No me malinterpretes: hay días en los que te extraño horriblemente, mas ya una vez ocurrió y fue suficiente. Me traicionaste de una de las peores maneras, exponiéndome. Se supone que los amigos no te dan la espalda. Se supone que están ahí para ti en las buenas y en las malas. Se supone que son las personas que te van a ayudar a defenderte sin importar el qué.

Es lo que hice por ti demasiadas veces, y al final, lo único que hiciste fue hacerme quedar como una estúpida.

Escena de la película chicas pesadas

No soy la misma persona que era hace cinco años, y eso debiste entenderlo. En aquel momento hubiese dejado que me lastimaras y aún de esta manera hubiera dicho que las cosas estaban bien entre nosotros aunque no fuera de este modo. Yo jamás te pedía explicaciones por el hecho de que sentía que no valía la pena, que todo debía proseguir como anteriormente.

Si hubieses sido una verdadera amiga, te hubieses dado cuenta de las cosas que me lastimaban y las hubieras dejado de hacer. No estoy diciendo que yo no cometí errores, por el hecho de que definitivamente estoy segura de que los cometí, mas le diste la espalda a la única persona que jamás te haría daño.

Amigas distanciándose

Estoy en una edad de mi vida en la que verdaderamente no necesito a absolutamente nadie que no me necesite, o que se comporte como si no me necesitara.

Te dejé atrás por el hecho de que eres parte de mi pasado, no de mi porvenir.

54

Relacionados:

Subir